Protege jurídicamente tu nombre o signo comercial.
Una de los beneficios de registrar tu marca, es que tendrás el uso exclusivo y excluyente de tu signo o nombre distintivo para los productos y servicios de tu actividad económica.
Por ejemplo, si registras la marca "HAKUNA MI MANTA" para productos textiles y otra persona comienza a vender telas con el mismo nombre o uno confusamente similar, podrás exigirle que deje de utilizar dicho nombre, disponiendo de la vía judicial si fuese necesario.
También, si el uso de tu nombre por otra persona desvió clientela o dañó la reputación de tu negocio, puedes solicitar que se paguen todos los perjuicios causados.
La Ley de Propiedad Industrial contempla acciones penales y civiles para proteger tu marca registrada.
Previene la imitación.
Otro de los beneficios de registrar tu marca es que le otorga el carácter de atributo único y distintivo para los productos o servicios que se pretender ofrecer dentro del mercado. Consecuentemente, la imitación detallada y exacta de ella constituye un acto de competencia desleal que daña la propiedad que ha construido la marca y afecta al consumidor, llevándolo a un consumo erróneo y contra su voluntad.
Es por esta razón que la Ley de Competencia Desleal y nuestro ordenamiento jurídico en general disponen de un amplio conjunto de acciones destinadas a hacer cesar un acto de competencia desleal respecto de una marca registrada.
Te distingue de la competencia.
Uno de los errores más frecuentes de pequeñas empresas es no diferenciarse de la competencia. El registrar tu marca te permitirá contar con un signo que distinga tu producto o servicio de los demás.
La marca tiene la función de ser un elemento identificador. Si una persona compra un producto y es bueno, va a querer comprarlo de nuevo, y lo recomendará. Para eso es necesario que pueda identificarlo y distinguirlo claramente del resto.
Otorga seriedad y confianza.
Un claro beneficio de registrar tu marca es que generarás confianza en el consumidor pues las empresas serias invierten en proteger su reputación a través de una marca registrada.
El contar con una marca registrada te permitirá usar el signo «®» para comunicar a tus clientes que cuentas con una marca inscrita.
La marca es un activo de tu negocio.
La marca registrada se convierte en uno de los bienes que posee tu empresa, en especial, un activo intangible.
Con el tiempo, los activos intangibles son mucho más valioso que los propios productos, pues los consumidores asocian una imagen a una cierta calidad. Las marcas famosas valen mucho más que todas sus fábricas juntas.
Podrás celebrar contratos sobre la marca.
Un gran beneficio de registrar tu marca es que como dueño podrás celebrar distintos tipos de contratos:
Por ejemplo, si tienes marca registrada con reputación y necesitas liquidez en tu negocio, podrás venderla a quién esté interesado.
Ahora, si quieres seguir siendo dueño de tu marca pero necesitas ingresos, puedes "arrendarla" para que la use alguien más durante un tiempo determinado.
Un contrato de Franquicia es una licencia de marca bajo determinadas condiciones y estándares para mantener la calidad y reputación del producto y la marca.
Por ejemplo, puedes abrir un local de sushi llamado "TUSHI" que cuente con gran reputación y clientela en la comuna de Santiago. En este caso, podrás Franquiciar a un local de sushi ubicado en la comuna de Vitacura para que ocupe la marca "TUSHI" y deberá cumplir ciertas obligaciones como la calidad de los ingredientes, el método de preparación y el estilo de la carta.
Cuando celebres contratos comerciales podrás regular el uso de la marca en una cláusula en la cual autorizarás o no el uso de la marca y la forma de utilizarla.
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